Capturada por Robert Capa, la imagen refleja el asesinato el anarquista Federico Borrell García, ocurrido el 5 de septiembre de 1936.
Una copia de la foto «Muerte de un miliciano» de Robert Capa, una de las imágenes más legendarias de la Guerra Civil española, se subastó en la galería fotográfica Westlicht de Viena por 144 mil euros.
Hecha entre 1936 y 1937, la copia, una de las pocas impresiones originales que se conocen del también llamado «The Falling Soldier», tenía un precio de salida de 60 mil euros y la suma alcanzada superó con creces la expectativa de Westlicht, cuyos expertos la habían tasado previamente entre 100.000 y 120.000 euros.
La pieza provino del archivo Black Star de Nueva York y fue probablemente realizada por el propio Capa, poco después de que tomara la fotografía.
La imagen refleja el momento en que el anarquista Federico Borrell García es asesinado el 5 de septiembre de 1936 a causa de un disparo en un paraje de Cerro Muriano, cerca de Córdoba, en el sur de España.
También conocida como «El soldado caído», la instantánea, en la que el miliciano aparece cayendo hacia atrás con un brazo estirado mientras de su mano se desliza un fusil, es un icono de la contienda española.
La obra del legendario fotógrafo de origen húngaro, efectuada desde una trinchera, se publicó por primera vez el 23 de septiembre de 1936 en la revista francesa «Vu».
Robert Capa, cuyo verdadero nombre era Andre Friedmann cubrió numerosos conflictos, entre los que destacan, además de la Guerra Civil, sus fotos del desembarco aliado de Normandía en la II Guerra Mundial.