Con dramaturgia y dirección de Sebastián Pajoni, la puesta sale a escena en la Sala Armando Discépolo de La Plata, con entrada gratuita.
En conmemoración del 4° centenario del fallecimiento de William Shakespeare y Miguel de Cervantes Saavedra, sale a escena la obra “El Viejo Otelo”, un disparatado homenaje a ambos escritores, con dramaturgia y dirección de Sebastián Pajoni.
La cita es los viernes y sábados a las 21 en la Sala Armando Discépolo, ubicada en la Calle 12 e/62 y 63 n°1473, en La Plata, con entrada libre y gratuita.
El elenco lo completan Ariadna Asturzzi, Carlos Juárez, Mauro Martucci, Mariana Ortiz Losada, Federico Ponce y Agostina Silvestri.
El vestuario es de Héctor Ferreira, la escenografía corre por cuanta de Magaly Acha y la sistencia de dirección es Martín Cruz y Laura Otero.
El autor y director, sobre la obra:
“En 1616 fallecieron Shakespeare y Cervantes, algunos dicen que el mismo día, otros lo desmienten por la diferencia de calendarios: el gregoriano y el juliano. El dato es poco relevante porque ambos son dramaturgos que dejaron huella a nivel mundial. Contemporáneos, reflejaron temas que son comunes al hombre de distintas culturas y los posicionaron como escritores de obras teatrales importantes para la humanidad.
Hace muchos años trabajo los entremeses de Cervantes en mis clases de actuación, y he representado a Shakespeare en varias oportunidades desde el principio de mi carrera como actor. Pero que me convoquen para conmemorar los 400 años de la muerte de ambos fue la sorprendente oportunidad de comparar sus obras y encontrar que las coincidencias eran tales que podían, inclusive, jugar a fusionarse.
Ese es el trabajo que proponemos, la fusión entre un entremés de Cervantes: «El viejo celoso», con una tragedia de Shakespeare: «Otelo, el moro de Venecia.»; el resultado es la Comedia Dramática: «El viejo Otelo». Por tal motivo los invitamos a conmemorar los 400 años del fallecimiento de dos de los más grandes autores dramáticos de todos los tiempos, para seguir afirmando que no morirán nunca”.