Creada a partir del libro del escritor en homenaje a una calle del barrio de Flores, está comedia negra cuanta con la dirección de Adrián Blanco.
Luego de una primera temporada, regresa a escena “Bacacay, Un crimen premeditado”, una comedia negra basada en relatos del libro “Bacacay” del escritor polaco/argentino Witold Gombrowicz, con dramaturgia de Adrián Blanco y Mario Frías.
Con dirección de Adrián Blanco, la puesta se presenta los viernes a las 20,30 en el Portón de Sánchez, el espacio ubicado en Sánchez de Bustamante 1034.
«Memorias del tiempo de la inmadurez», fue el primer libro de cuentos de Witold Gombrowicz, que luego se publicó en castellano con el nombre de «Bacacay», en homenaje a una calle del barrio de Flores.
La columna vertebral de la obra está basada en uno de los cuentos de dicho libro («Crimen premeditado»), el cual se fue hilvanando, en el proceso dramatúrgico, con materiales incluidos en otros relatos de «Bacacay». La inmadurez, lo bajo, lo imperfecto, son lo conceptual en Gombrowicz y es la brújula creativa de «¡¡¡Bacacay!!! Un crimen premeditado»
El Juez de Instrucción H, presenta a la audiencia uno de sus casos más insospechados. Este se dirige a visitar al señor X con el propósito de ayudarle a resolver algunos problemas referentes a sus propiedades. A su llegada, se entera que el señor X ha muerto la noche anterior.
Decide quedarse en la casa de su difunto amigo, quien ha fallecido de muerte natural, confirmado por su familia y el personal de servicio.
No obstante, el Juez de Instrucción H está convencido, aunque sin pruebas a la vista, de que su familia se comporta como si lo hubiese asesinado. Siguiendo este criterio, no parará hasta lograr develar el enigma.
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El elenco de “Bacacay” lo completan Fito Yanelli, Mario Frías, Gabriela Ramos, Eva Matarazzo, Julieta Raponi y Ariel Haal.
La obra tiene espacio sonoro de José Paéz, diseño de Luces de Sergio Iriarte, diseño gráfico de Gabriela Ramos, vestuario de Milena Amado, dispositivo escénico de Adrián Blanco, realización escenográfica de Gustavo Coll, asistencia de dirección de Silvina Cassou y producción ejecutiva de Martina de Pablo.
