Se destacó en el departamento del coleccionista alemán Cornelius Gurlitt, fallecido hace tres meses, el hallazgo de las piezas que podrían ser de los artistas franceses Edgar Degas y Auguste Rodin.
Las autoridades alemanas informaron el hallazgo de nuevas obras de arte durante la inspección que realizaron en la vivienda en Munich del coleccionista alemán Cornelius Gurlitt, tres meses después del fallecimiento del dueño del llamado “Tesoro de Munich”.
Según señalaron los responsables de la investigación, entre las piezas encontradas ahora y de los que no se tenía noticia, se destacan dos esculturas cuyos autores podrían ser los artistas franceses Edgar Degas y Auguste Rodin.
Tras el descubrimiento, las obras fueron llevadas al Tribunal de Primera Instancia de Munich y deberán ser ahora examinadas por expertos para discernir su procedencia y autoría.
Gurlitt era hijo del vendedor de arte Hildebrandt Gurlitt, uno de los pocos que tuvieron autorización del régimen nazi para negociar con obras del así llamado “Arte degenerado”, que habían sido retiradas de los museos alemanes.
Las autoridades alemanes investigan ahora si estas obras también pueden provenir del expolio de propietarios judíos durante el gobierno de Adolf Hitler.
No se trata de la primera vez que se encuentran nuevas obras desconocidas, ya que a las primeras 1.280 piezas halladas en 2013 en su piso de Múnich se unieron el pasado febrero otras 238 obras encontradas en otra casa propiedad de Gurlitt en Salzburgo (Austria).
En esta casa se encontraron, entre otras, varias obras de maestros como Pablo Picasso, Claude Monet y Pierre-Auguste Renoir.
Gurlitt, fallecido el pasado 6 de mayo a los 81 años, estableció que el Museo de Arte de Berna fuese el heredero único de su colección aunque la institución suiza aún no decidió si aceptará la colección.