«Les femmes d’Alger», del pintor malagueño, fue vendida en 179 millones de dólares, mientras que una pieza del escultor suizo alcanzó los 141 millones.
“Les femmes d’Alger (Version ’O’)”, de Pablo Picasso, se transformó en el cuadro más caro subastado de la historia al alcanzar los 179,36 millones de dólares, mientras que una pieza de pieza de Alberto Giacometti también obtuvo ese récord en escultura al ser vendida en 141 millones, en una contienda en la casa Christie’s en Nueva York.
La pintura, realizada por el pintor español en 1955 y con unas dimensiones de 114 por 156,4 centímetros, es la culminación de una serie de 15 cuadros con los que revisó en clave cubista el cuadro del mismo título del artista francés Eugène Delacroix, que le llegó a obsesionar y en el que creía ver a la última de sus mujeres, Jacqueline Roque.
Esta obra de madurez del artista malagueño, que había sido subastada en 1997 por 32 millones, se recotizó hasta superar el precio de “Tres estudios de Lucian Freud”, de Francis Bacon, tríptico que se subastó en 2013 por 142,4 millones de dólares.
“Les femmes d’Alger (Version ’O’)” también es, como el de Bacon, un diálogo entre dos artistas (Picasso y Delacroix) o incluso tres, puesto que es “una especie de respuesta a la muerte de Marisse, su amigo y rival”, que sucedió en noviembre de 1954, explicó a la agencia española Efe la Ana María Celis, del departamento de arte contemporáneo de Christie’s.
Fuera del circuito de de las subastas, el cuadro más caro jamás vendido es “Nafea Faa Ipoipo” (¿Cuándo te casarás?) de la fase tahitiana de Paul Gauguin, que se adquirió en venta privada a un coleccionista de Catar por unos 300 millones de dólares.
En escultura, el suizo Alberto Giacometti se superó a sí mismo y su «L’homme au doigt» (el hombre que señala), se convirtió en la escultura más cara jamás subastada al alcanzar los 141,28 millones de dólares y superar a «L’homme qui marche I», del mismo autor, que se vendió en 2010 por 104,3 millones de dólares en Londres.