Con dirección de Francisco Prim, la obra propone, con picardía y frescura, reflexionar sobre la dimensión filosófica del tiempo.
“La Química Diaria”, la nueva comedia de Mariano Saba y con dirección de Francisco Prim, se presenta los sábados a las 16,30 en el porteño Teatro Nün, ubicado en Juan Ramírez de Velazco 419.
Esta nueva comedia que propone, con picardía y frescura, reflexionar sobre la dimensión filosófica del tiempo. La obra surgió con el deseo de indagar la temática de los mundos paralelos poniendo el foco en aquellas decisiones que determinan la existencia; ese conflicto siempre universal respecto de los momentos vitalmente determinantes, con un texto que cruza el humor con la metafísica y la ciencia ficción, junto a diversas hipótesis científicas, disimiles entre sí, de pensadores tales como Einstein, Schrödinger o Hawking.
Todo transcurre en un verano en verano en el sur patagónico. Tres amigos, Johnny, Luca y Facu, acampan cerca de un lago. A las puertas de la vida adulta, el trío sopesa sus días ya vividos, sus decisiones.
Johnny, porta un casete donde en la remota pubertad supieron grabar sueños para el futuro. El único dispositivo para escuchar la cinta llega de la mano de Vladimir, dueño del camping, quien les presta un walkman de curiosa procedencia.
El tiempo pasa. De pronto, Facu se ve sacudido por la sorpresiva presencia de Karina, un amor imposible de colegio. A partir de allí, intentará modificar su pasado y para tal fin grabará nuevos deseos sobre los ya registrados en la cinta. Pero el tiempo no sabe nada de nosotros, y juega sus dados multiplicándose con una ironía precisa e inexacta a la vez.
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“¿Acaso no es propio del hombre especular con la infinidad de sus caminos descartados? ¿Acaso no es humana la melancolía por el tiempo no correspondido? Se trata tal vez de la utopía de vivir mil vidas como si fueran los avatares de un sueño imposible, de un teatro siempre renovado y risueño. Porque el tiempo no es sólo cuestión de física; pareciera más bien un asunto propio del deseo. Y es la química la que delata su paso. Porque la química del tiempo denuncia a la vez las vidas no vividas y el porvenir. Y porque el tiempo pudiera ser, en definitiva, esa química extraña que nos transforma de manera imparable. La química tragicómica del recuerdo y del olvido. La química invisible, incierta, inescrutable. La química diaria”, explica Mariano Saba.
El elenco lo completan Pablo Mónaco (Vladimir); Fermin Varangot (Facu); Santiago Fondevila (Luca) Tomás Mejía (Jhony); Flor Chmelik Martinec (Karina) y Francisco Andrade (Cristian).